Hoy en universohijos.com nos pondremos filosóficos. Hoy profundizaremos la cúspide de la pirámide de Maslow. Y es que hoy hablaremos de la autorrealización, ese concepto clave que completa la pirámide de las necesidades de Maslow y que explica su teoría de la personalidad. Hoy nos preguntamos: ¿qué es la autorrealización?, ¿qué personalidad tiene la persona autorrealizada? y ¿qué son las experiencias-cima?
¿Qué es para Maslow una persona autorrealizada?
Con Maslow ocurre algo fascinante: si seguimos su teoría vemos que las personas no tenemos techo, que somos insaciables, que las necesidades nunca están satisfechas. Esto lo comentamos en el primer episodio en la que hablamos precisamente de la pirámide de Maslow.
Para Maslow, la naturaleza cada ser humano es individual, innata e intrínseca pero compartimos todos que nuestra naturaleza no es en esencia mala sino que él explicaría la maldad, el cinismo y la crueldad como el resultado de la frustración causada por la insatisfacción de las necesidades que conforman la pirámide.
Puede parecernos paradójico, ¿verdad? Si experimentamos estos sentimientos o emociones cuando estamos insatisfechos, si tenemos en cuenta que nunca estamos satisfechos -ya que esa insaciabilidad es nuestro empuje vital-, ¿experimentamos siempre maldad, cinismo y crueldad? Lo cierto es que podríamos pensar que en el mundo en general hay demasiada frustración, pero si vamos a nuestro día a día, esos sentimientos negativos o emociones negativas no las sentimos a pesar de no haber satisfecho nuestras necesidades. Aquí es cuando entra en juego, la inteligencia emocional de la que ya hablamos en episodios anteriores. Y es que, el control de la frustración que nos genera la insatisfacción permanente de las necesidades es la clave para construir en positivo para llegar a las experiencias-cima. Más adelante veremos en qué consisten.
¿Cómo es la personalidad de la persona autorrealizada?
Maslow partió de un modelo ideal de la persona autorrealizada que os mostraré a continuación. De todos modos, os adelanto que ese ideal no existe sino que se construye a lo largo de la vida, pero es ese marco del que el autor partió para acotar qué era para él la persona autorrealizada.
En primer lugar, no hay autorrealización si no tenemos obviamente, las necesidades deficitarias cubiertas. Recordemos que esas necesidades deficitarias son necesidades fisiológicas, de protección, de afecto y aceptación y de valoración.
Es una persona con un autoconcepto positivo de sí mismo, es autónoma, natural y expresa sus emociones. Es flexible ante los cambios, democrática y es capaz de dar amor.
Tiene una percepción clara de la realidad, es decir, sortea estos sesgos cognitivos tan inherentes en nuestra naturaleza.
En un episodio ya hablamos de las creencias limitantes y de la importancia de ponerlas en duda, de ser escépticos y dudar de lo que damos por hecho porque puede que nos impida abrirnos al mundo.
El autoconcepto positivo, tiene mucho que ver con esas creencias. De hecho, tiene mucho que ver con nuestra capacidad de viajar a nuestras profundidades e indagar en éstas, de lo que hemos dicho antes, poner en jaque a esas creencias limitantes y de mirarnos no desde la exigencia del que tiene que ser perfecto sino desde la aceptación. Sólo desde la aceptación y desde la comprensión de nosotros mismos podemos tener un autoconcepto positivo.
En muchas ocasiones cuando experimentamos emociones que no es que sean negativas (tendríamos que olvidarnos de emociones positivas-negativas), pero que nos generan malestar, tenemos que aceptarlas y vivirlas sin juzgarnos. Lo digo, no porque quede bonito, lo digo porque constantemente nos estamos juzgando a nosotros mismos. Sería sentir esa autocompasión necesaria para comprendernos para poder mejorar.
Fijaos, si nos juzgamos nos vemos desde el prisma de la negatividad. Experimentamos esa frustración absurda porque hemos fallado o no somos satisfacemos las expectativas que nuestro propio juez interno nos impone.
¿Qué son las experiencias-cima?
Son experiencias, hechos o situaciones vividas que nos marcan y nos dejan una estigma que nos cambia nuestra forma de ser y de ver el mundo y la vida.
- Son experiencias en las para la persona son siempre positivas y deseables.
- Nos ofrecen un cambio de nuestra percepción del mundo y de la vida.
- De algún modo, experimentamos una sensación de pérdida de la noción del tiempo y del espacio. Lo trasciende.
- Supone haber trazado un camino complejo, difícil y lleno de conflictos.
Fijaos, ¿qué vivencias nos han hecho cambiar y transformarnos? Aquellas que la vida nos ha puesto al límite, cuando hemos tenido que luchar y/o poner mucho esfuerzo. Todos tenéis una o varias experiencias de este tipo en vuestra mente ¿verdad?
- ¿Trascienden o no, el espacio-tiempo?
- Aunque a simple vista no siempre puedan ser positivas o deseables, lo que hacemos después con ellas, es decir, como transformamos esa vivencia y le damos un sentido, o mejor dicho, el SENTIDO (así en mayúsculas), ¿al final se convierten en experiencias que nos hacen crecer como personas?.
- ¿Cambian o no, nuestra forma de ver la vida y el mundo?
Y es que al fin y al cabo, nos transforman como personas y nos dotan de sabiduría. Son esas experiencias las que hacen que nuestras motivaciones se orienten en hacer de nuestro mundo un mundo mejor. Necesitamos generaciones de jóvenes inteligentes emocionalmente, que trabajen en objetivos y proyectos que hagan de nuestro mundo un mundo mejor y que permita que se autorrealicen y que vivan esas experiencias-cima.
Bueno madres y padres, educadoras y educadores, hasta aquí el programa de hoy. Era necesario dedicarle un episodio al concepto de autorrealización de Maslow porque nos ayuda a reflexionar sobre el sentido de la vida. Al final las experiencias y lo que nos sucede no lo elegimos nosotros, pero sí decidimos qué podemos hacer con ello. Podemos decidir hacia dónde queremos caminar, cómo caminar y construir un camino lleno de sentido.